La incapacidad permanente es una condición que puede surgir debido a enfermedades o accidentes que impiden a una persona realizar su trabajo habitual. Ante esta situación, una de las dudas más comunes es cuántas veces se puede solicitar esta prestación.
La normativa de la Seguridad Social establece que se pueden presentar varias solicitudes de incapacidad permanente en función de la situación médica y laboral del solicitante. Existen ciertos requisitos y procedimientos que determinan si es posible volver a solicitar la incapacidad.
A continuación, se profundiza en la posibilidad de realizar solicitudes múltiples y en los aspectos clave que se deben tener en cuenta al presentar nuevas solicitudes.
¿Es posible solicitar la Incapacidad Permanente más de una vez?
Sí, es totalmente posible solicitar la incapacidad permanente en más de una ocasión, ya sea por vía administrativa o judicial. No existe un límite en el número de veces que se puede presentar una solicitud, ya que las circunstancias médicas o laborales pueden cambiar con el tiempo, lo que puede justificar una nueva solicitud.
Es importante señalar que si una solicitud inicial es rechazada por el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), el solicitante tiene la opción de iniciar nuevamente el proceso administrativo con una nueva solicitud.
Existen varias razones que pueden llevar a una persona a volver a solicitar la incapacidad permanente. Por ejemplo, si la situación de salud del solicitante empeora o si surgen nuevas pruebas médicas que justifiquen una revisión, el INSS puede ser solicitado nuevamente.
La normativa reconoce que la salud de una persona puede experimentar cambios importantes con el tiempo, lo que permite la posibilidad de realizar nuevas solicitudes.
Casos en los que puedes volver a solicitar la Incapacidad Permanente
Existen diversas situaciones en las que es posible presentar una nueva solicitud de incapacidad permanente. A continuación se describen algunos de los casos más relevantes:
- Recurso tras denegación: Si la solicitud de incapacidad es rechazada a nivel administrativo y la reclamación previa no tiene éxito, el solicitante puede llevar el caso ante el Juzgado de lo Social. Este es un procedimiento habitual, ya que muchas solicitudes son inicialmente denegadas y luego se resuelven en los tribunales.
- Plazo de cinco años: Si la solicitud es denegada y se considera que la decisión fue incorrecta, existe un plazo de cinco años para volver a solicitar la incapacidad, basándose en la misma situación.
- Nueva patología: Si se desarrolla una nueva patología, el solicitante puede iniciar un nuevo proceso de solicitud. Aunque no es común solicitarlo nuevamente antes de la resolución de un juicio en curso, es posible hacerlo, especialmente si los síntomas empeoran considerablemente.
- Revisión de grado: Si el solicitante ya tiene reconocida una incapacidad permanente y su situación de salud empeora, generando más limitaciones funcionales, se puede solicitar una revisión de grado. Para ello, es recomendable presentar informes médicos actualizados ante el Tribunal Médico.
- Agotamiento de la vía judicial: Si se han agotado todas las instancias judiciales en una solicitud previa, se puede volver a presentar una nueva solicitud mediante el procedimiento administrativo.
Proceso administrativo para solicitar de nuevo la Incapacidad Permanente
El proceso para volver a solicitar la incapacidad permanente comienza con la presentación de la solicitud ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social, acompañada de la documentación médica correspondiente.
Si la solicitud es denegada, el solicitante tiene la opción de presentar una reclamación previa dentro de los 30 días siguientes a la notificación de la denegación, para que el INSS reconsidere su decisión. Si esta reclamación también es desestimada, el solicitante puede llevar el caso ante el Juzgado de lo Social, donde se impugnará la resolución administrativa.
Solicitar tras una denegación inicial
En caso de que la solicitud de incapacidad permanente sea denegada, el solicitante puede presentar una reclamación previa ante el INSS. Este recurso debe presentarse dentro de un plazo de 30 días desde la notificación de la denegación. En esta etapa, es posible aportar nueva documentación médica que respalde la solicitud original y que pueda cambiar la decisión del INSS.
Si la reclamación previa es rechazada, el siguiente paso es recurrir al Juzgado de lo Social, donde se presentará el caso ante un tribunal y se evaluará si se cumplen los requisitos necesarios para conceder la incapacidad permanente.
Solicitud por agravamiento de las dolencias
En caso de que la incapacidad permanente se haya agravado tras la solicitud inicial, el trabajador puede iniciar un nuevo proceso de solicitud ante el INSS. Esto es válido cuando los síntomas de la enfermedad o lesión previamente alegada se han empeorado, o si han surgido nuevas patologías que amplían el cuadro clínico original.
La solicitud ante el INSS, aunque ya exista un proceso judicial en curso, tiene como objetivo reflejar la nueva situación de salud y actualizar la evaluación del grado de incapacidad, sobre todo en casos de deterioro evidente o la aparición de nuevas limitaciones.
Si el trabajador ya tiene una incapacidad reconocida y experimenta un agravamiento de los síntomas que le genera mayor dependencia para actividades básicas o mayores limitaciones físicas, puede solicitar una revisión de grado. Este procedimiento requiere la presentación de informes médicos actualizados que justifiquen el deterioro de la condición original, con el fin de ajustar el grado de incapacidad al nuevo nivel de afectación funcional.
Proceso judicial: Cómo recurrir si te han denegado la Incapacidad Permanente
El proceso judicial para recurrir una denegación de incapacidad permanente sigue los mismos pasos, ya sea para una primera solicitud o para solicitudes posteriores. Cuando el INSS rechaza la solicitud, el solicitante puede iniciar el recurso judicial presentando una demanda en el Juzgado de lo Social.
Este proceso implica la recopilación y presentación de pruebas médicas y documentos que respalden el derecho a la incapacidad y la solicitud de que un juez revise la decisión del INSS. No hay un límite en el número de demandas que se pueden presentar, siempre que se cuente con nuevos fundamentos o una agravación de la situación de salud.
Si se agota la vía judicial: ¿Qué opciones tienes?
Si se agota la vía judicial sin éxito, es posible recurrir la denegación de incapacidad mediante nuevas solicitudes administrativas o judiciales en el futuro. Esto es frecuente cuando se presenta un agravamiento o una nueva patología que justifique la incapacidad permanente en un grado superior, o cuando aparece nueva evidencia médica.
¿Qué hacer si se producen nuevos agravamientos o patologías antes del juicio?
Si, antes de un juicio por incapacidad permanente, se produce un agravamiento de la situación o surgen nuevas patologías, el solicitante puede iniciar una solicitud administrativa adicional, aunque ya exista un proceso judicial en curso. El sistema permite considerar circunstancias médicas significativas que aparezcan después de la fase administrativa, conforme al artículo 143.4 de la LRJS.
El marco legal establece que estos hechos nuevos —si no fueron detectados o conocidos previamente— pueden presentarse en el juicio para garantizar que la valoración de la incapacidad refleje la situación real de salud.
Conclusión: Recomendaciones para volver a solicitar la Incapacidad Permanente
Para volver a solicitar la incapacidad permanente, es recomendable que el solicitante reúna pruebas médicas sólidas y actualizadas que respalden la solicitud, especialmente si existen nuevos agravamientos o patologías que no fueron incluidas en la solicitud inicial.
Al preparar la nueva petición, el solicitante debe documentar de manera detallada cómo las nuevas dolencias o el empeoramiento afectan su capacidad laboral. Es fundamental contar con asesoría profesional para gestionar el proceso administrativo y judicial de manera adecuada.
Esto facilitará tanto la presentación de la documentación necesaria como la posible defensa ante el INSS y los tribunales, aumentando las probabilidades de éxito en la nueva solicitud de incapacidad permanente..